Técnica basada en las indicaciones de Emmet Fox:
Basándonos en que nuestros pensamientos modelan nuestra realidad, se trata de motivar al paciente para que durante un periodo de 7 días, se comprometa a alimentar su mente tan solo con pensamientos positivos, procediendo a evitar y rechazar los llamados negativos.
Para adecuar correctamente esta técnica convendrá conversar con el paciente acerca de los siguientes puntos:

1-Nuestros pensamientos tienden a ser repetitivos, crean hábitos y conforman nuestro sistema de creencias.
2-La “ley de la atracción” determina que “se acerque” a nuestra vida lo “semejante”. En virtud de esta ley, lo positivo atraerá el éxito, el amor y la fortuna. Por el contrario desde lo negativo sucederá al revés.
3. No hay buena suerte o mala suerte: hay calidad de pensamientos.
4. Esta práctica no solo conlleva un trabajo estrictamente mental, sino que por el discernimiento que conlleva, tiene una connotación espiritual o transpersonal muy elevada. En realidad, para discernir si un pensamiento es positivo o negativo, es necesario mantener la ATENCION SOSTENIDA, no solo a la corriente mental de tales pensamientos, sino al propio corazón, centro sutil que avisa de inmediato sobre la calidad de los mismos.
5. Téngase en cuenta que de la misma forma que se deja de fumar o se asume una dieta, conviene no comenzar esta práctica a la ligera. El paciente deberá prepararse con antelación, poner una fecha de comienzo, y entrar en este proceso como si de un camino iniciático se tratase. Durante los 7 días de dieta mental, el paciente vivirá absorbido en el foco atencional de sus pensamientos, actividad que pasará a ser lo más importante de su vida.
6. Un pensamiento negativo es cualquier pensamiento de fracaso, crítica, despecho, envidia, condenación, pesimismo… que se manifiesta en frases tales como: “esto me enferma”, “es insoportable2, “la vida es una lucha”, “vivir es sufrir”, “no hay derecho”, “es horrible, siempre me pasa”, “nunca podré”, “todo me sale mal”, “no tengo suerte”, “me veo inferior”, “qué asco” “qué rabia”, ”qué mierda” …
7. De la misma forma que mientras contemplamos el fuego de una chimenea, una brizna de carbón puede saltar sobre nuestra camisa de seda, y gracias a estar atentos, procedemos a rechazarla de inmediato y sin frotar, así también nos apartamos de un pensamiento o de las opiniones negativas que otros emiten, sin discutir con ellos, pero afirmándonos interiormente en un “no acepto esto” o incluso pronunciando mantrams tales como: “soy lucidez”, “soy amor”, “permanezco en mi esencia”, “no acepto”, ”esto no tiene ningún efecto sobre mí” …
8. Ante la llegada de problemas o de situaciones difíciles y delicadas de la vida, la dieta mental no consistirá en ignorarlos, procediendo a taparlos sin dedicarles la medida de reflexión necesaria, sino que más bien, establezcamos claras diferencias entre el “dar vueltas al problema” entre quejas circulares, o bien enfocarnos directamente en las soluciones del mismo, aunque estas al principio no se vean.
9. La mejor obra de arte que uno puede hacer en la vida, es construirse una mente feliz.
10. Atención, Atención, Atención, sin duda un estado de conciencia que recuerda a la actitud de un gato cuando se encuentra al acecho de un ratón. Atención Plena.
11. Si por ejemplo a los 3 días de práctica, el sujeto falla o procede a alimentar su mente de materia mental indeseada, deberá hacer lo mismo que en otras dietas médicas, es decir: interrumpir su dieta, darse un espacio mínimo de 3 días de lapsus, y volver a comenzar con total entrega y compromiso.
El que siembra un pensamiento cosecha una acción,
El que siembra una acción cosecha un hábito,
El que siembra un hábito cosecha un carácter
El que siembra un carácter cosecha un destino.
12. Conviene solicitar que todas las mañanas, el practicante de esta dieta, al iniciar la jornada, realice una tanda de respiraciones conscientes y escriba:
“Me comprometo durante el día de hoy a estar plenamente atento a la calidad de mis pensamientos, procediendo a rechazar y neutralizar, todos aquellos que tiendan a intoxicar el corazón de mi mente”.
Así mismo, escribe por la noche:
“Agradezco a la Inteligencia Universal la fuerza y determinación que me permite mantener mi mente en un registro de impecabilidad y discernimiento”.
RESUMEN Y RECOMENDACIONES
Esta práctica está recomendada para aquellas personas con hábitos mentales negativos.
Todo proceso mental negativo se debe a la interpretación pesimista de lo que sucede.
En realidad “Los hechos son neutros, son las interpretaciones de los mismos los que los convierten en esperanza o desastre”.
La persona entrenada en detectar la llegada de toxinas en su corazón (a la mente se la puede engañar, pero al corazón no), mientras practique la dieta mental procederá de inmediato a crear un nuevo significado, un significado que se abra a la ventura que subyace detrás de todos los fenómenos universales.
“Todo pensamiento torcido, conlleva una molécula torcida”. Deepack Chopra
Nuestro corazón y en última instancia nuestro cuerpo, serán el mejor detector de posibles pensamientos intoxicantes que por nuestra mente puedan desfilar.